Nuestro arte siempre vivirá entre tertulias y barracones.

Las tertulias eran reuniones informales y periódicas, donde se agrupaban una cierta cantidad de personas interesadas en un mismo tema o una rama concreta del arte, la ciencia o la filosofía a debatir, informarse y compartir opiniones. Es una costumbre de origen española, asociada a la costumbre hispánica de la charla sobremesa, y se estableció hasta mediados del siglo XX en las colonias independizadas del imperio español.

Y los barracones eran casas de grandes dimensiones y sin tabiques, en la colonia española en Cuba donde vivían los africanos esclavos. Sin duda con pocos recursos y cercas de las casas de los españoles.

En mis venas transcurre la sangre de tertulias y barracones; los cubanos somos el fruto entre dos culturas totalmente diferentes. Por el lado español predominaron los grupos provenientes del reino de Castilla y sobre todo el sur de españa. La raíz africana procedente de varias etnias como yorubas, congos, carabalíes, dejan una huella muy particular en este proceso. Como esclavos estuvieron mezclados en los barracones y las plantaciones creando nuevas comunidades entre la propia comunidad africana.

Desde las plantaciones antes de la abolición de la esclavitud, se empiezan a conciliar entre los esclavos y los amos dando a conocer una cultura nueva y diferente a sus raíces originales.